La focalizada audiencia del #MundialBrasil2014 no nos dá descanso, los memes salen casi de inmediato con cada acción, los trinos viajan a la velocidad de la luz y la genialidad o desfortuna de las ideas creativas se ven por doquier. Les decía en el post anterior que las marcas debían entrar en la conversación mundialista para aprovechar el exagerado escenario de exposición que seguramente no se repetirá en los próximos cuatro años. Pues bien, el asunto ese de participar de la conversación implica creatividad y riesgo, soy amiga de la prudencia y eso necesariamente limita el ingenio, pero aquellos más osados bailan en la cuerda floja de lograr hazañas de marca o caer al abismo.
Un ejemplo de creatividad y riesgo administrado a favor de la marca nos lo dio el pasado martes la cuenta de @McDonalds_Uy al salir al ruedo ante la avalancha de comentarios jocosos sobre la "mordida" que propinó Luis Suárez a un jugador del seleccionado Italiano; ese hecho no puede ignorarse entre un público como el de twitter, pero la gente de McDonalds Uruguay encontró la coherencia entre su producto y los hechos con un tuit tan arriesgado que resultó genial.
El tuit en general le resultó divertido a la gran mayoría de tuiteros, los medios de comunicación se encargaron de darle exposición a la cuenta como algo ingenioso y destacable, los retuits continúan 48 horas después en aumento, las visitas a la cuenta y los seguidores también van en ascenso. Esta acción fue acertada porque tiene correlación con el producto, lo lees y te guste o no, la broma está clara sin ser ofensiva.
En la otra cara de la moneda llega un gigante del marketing con su cuenta local @CocaColaCol que como recurso innovador para la comunicación de su marca con los seguidores invitó a algunos influenciadores para narrar el partido Colombia vs Japón a través de la cuenta oficial de la marca, una idea creativa y arriesgada.
En el transcurso de la actividad la redacción personalizada que dieron los invitados genero interacción y visibilidad dentro del mar de comentarios que se hacían del partido, sin embargo lo que podía salir mal al final pasó, uno de los "irreverentes" tuiteros se pasó de picante en la sopa y la dañó.
Con este tuit dónde la broma pasa los límites de lo divertido, solo puedo repetir lo que leí de uno de los tantos tuiteros que les respondió :
Para hacer una broma hay que saberla hacer, seguramente la gente no va dejar de tomar Coca Cola mañana, seguiremos ovacionando la chispa de la vida y las acciones de marca tan acertadas que realizan con sus campañas, pero no se puede negar que el manejo de los invitados se les salió de las manos; además no ayuda que el tuitero invitado que hizo la publicación se dedicó a burlarse aún más del hecho en su cuenta personal.
No ha muerto nadie, Mondragón está por encima de esos y cualquier otros comentarios, se leen a diario cosas peores en twitter , etc.; lo que no se puede es negar que el comentario fue imprudente, que no había suficiente conocimiento de la acción de la marca ya que aún la gente cree que fue el CM oficial y no un invitado, tener que disculparse con periodistas y cuentas grandes aumentó la exposición del error y no de la actividad, los comentarios de disgusto fueron muchos y a nadie le gusta que hablen mal de su marca en medio de un evento de tanta exposición.
Esta fue una actividad creativa con un alto grado de riesgo que por ser planificada y no espontánea los vuelve más responsables del error, pero a nosotros que trabajamos con marcas en el entorno digital nos enseña a tener más cautela de a quien le damos la libertad de hablar en nombre de nuestra marca.
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